Inteligencia animal


La película "el planeta de los simios" encarna perfectamente la pesadilla de la paradoja de la inteligencia: Taylor (Charlton Heston) encerrado en una jaula, intenta desesperadamente convencer a sus guardias (todos simios inteligentes y parlantes) que él no es un animal común (en ese planeta los hombres están reducidos a un primitivismo animal), que es tan inteligente como ellos.
Los primatólogos que estudian inteligencia en chimpanzes se encuentran en una situación similar a los sabios del planeta de los simios, pero ante la pequeña pero importante diferencia que intentan a toda costa extraer y demostrar la capacidad cognitiva de estos primates.

El interesante experimento que se puede ver en el video aquí bajo muestra que el chimp Ai tiene una increible capacidad de memoria fotográfica y de conceptualización cardinal (es decir concebir el orden de los números) y que en esto puede superar a los humanos. Hay que observar que Ai responde a estímulos externos, pues cuando logra resolver el problema, recibe un premio (comida o agua en general, ya que a estos animales los tienen hambrientos o sedientos para estos experimentos).

Muy diferente es lo que primero observó la famosa primatóloga Jane Goodall. Pudo ver en el parque de Gombe en Tanzania, que los chimpanzes salvajes utilizan palos y piedras para sacar hormigas del homiguero y romper nueces. Muy lejos están estos comportamientos de lo que logra Ai ante una pantalla, pero estos dos experimentos muestran que el estímulo externo es necesario para hacer avanzar la complejidad de un comportamiento: En los dos casos, la comida.

Parece entonces que tenemos tendencia a olvidar que estos chimpanzees, a pesar de sus capacidades congnitivas, siguen siendo animales salvajes. Lo muestra la historia de una mujér que vivía desde hace 14 años con Travis el chimpanzé, parte de la familia (sic), y que repentinamente atacó a su vecina causando terribles heridas en la cara. La mujér apuñaló al animal cuya vida acabó a tiros de bala de la policía.

Todo acabó además con una escandalosa caricatura que comparaba a Obama con el chimpanzé...aunque no es la primera vez que esto le sucede a un presidente americano. Pobres chimpanzés!